Un reciente estudio realizado por investigadores de la UCLA, publicado en la revista Cancer Prevention Research, informa que el consumo de una dieta baja en grasas en combinación con suplementos de aceite de pescado rico en omega-3 podría estar asociado a niveles más bajos de sustancias pro-inflamatorias en la sangre y una progresión del ciclo celular más baja (medida usada para predecir la recurrencia del cáncer ) que los hombres que consuman una dieta occidental típica.
El equipo, dirigido por el profesor William Aronson, anunció que sus hallazgos son importantes debido a la reducción de la progresión del ciclo celular, que puede ayudar a prevenir que los cánceres de próstata se vuelvan más agresivos.
Los nuevos resultados vienen como resultado a un seguimiento a un estudio de 2011, que sugiere que una dieta baja en grasas con suplementos de aceite de pescado ricos en omega-3 consumidos durante cuatro a seis semanas antes de la extirpación de la próstata, retrasa el crecimiento de células cancerosas en el tejido de cáncer de próstata humano en comparación con una dieta con alto contenido en grasa.